Techo a dos aguas (techo a dos aguas o a dos vertientes)
Es el tipo de techo más básico y común. Tiene dos lados inclinados que se encuentran en el centro formando un ángulo en forma de "V". Es muy eficiente para drenar el agua de lluvia y se utiliza en casas residenciales y estructuras comerciales.
Techo a cuatro aguas (techo a cuatro vertientes)
Similar al techo a dos aguas, pero con cuatro lados inclinados en lugar de dos. Este tipo de techo también es eficiente para el drenaje del agua y es común en casas de estilo colonial y algunas edificaciones comerciales.
Techo a un agua (techo a una vertiente)
Este techo tiene un solo lado inclinado y se apoya en una estructura de soporte en la parte trasera, mientras que la parte frontal queda completamente abierta. Es comúnmente utilizado en extensiones de edificios y estructuras con espacios exteriores cubiertos.
Techo plano
Como su nombre lo indica, este techo tiene una superficie plana. Es común en edificios comerciales, industriales y modernos. Puede tener una leve inclinación para permitir el drenaje del agua o estar completamente plano y contar con un sistema de drenaje incorporado.
Techo abovedado o cúpula
Es un techo que tiene una forma curvada o semiesférica. Se utiliza en edificios religiosos, museos, salas de exposiciones y otros lugares con fines estéticos y acústicos.
Techo de paja o caña
Este tipo de techo se construye con materiales naturales, como paja, caña o materiales vegetales similares. Aunque menos comunes en áreas urbanas, todavía se utilizan en algunas regiones rurales debido a su disponibilidad y características aislantes.
Techo de tejas
Puede ser de cerámica, concreto, pizarra u otros materiales. Las tejas se superponen para crear una cubierta resistente al agua y se utilizan en una variedad de estilos arquitectónicos.
Techo de metal
Puede ser de aluminio, acero, cobre u otros metales. Son duraderos, ligeros y resistentes al fuego, lo que los hace populares en edificios industriales y residenciales contemporáneos.
Techo verde
Es un techo que incorpora vegetación y plantas en su superficie. Además de proporcionar beneficios estéticos, estos techos pueden ayudar a mejorar la eficiencia energética y la gestión del agua en edificios.
Techo retráctil o deslizante
Este tipo de techo se puede abrir o cerrar para permitir la entrada de luz natural y aire en determinadas áreas de una estructura.
Estos son solo algunos ejemplos de los diferentes tipos de techos disponibles. La elección del techo adecuado dependerá de factores como el clima local, el presupuesto, el diseño arquitectónico y las necesidades específicas del edificio o estructura.